CONSANGUINIDAD
Nunca pedí
socorro
hoy me hundo
en mi miseria
humana
en mi interna
lombriz solitaria
que me devora
el alma y el
sentimiento.
Recurro a mi
origen
a la hermandad de
madre
a la
consanguinidad
al lazo
indestructible
al cordón
umbilical.
Nunca sentí
tanta carencia
orfandad extrema
corazón
solitario único.
Ya no soy la que
fui
la mujer fuerte
sobreprotectora
capaz de levantar
el mundo
soy pequeña y
frágil
una débil
mariposa
sin destino,
desolada,
solitaria,
abandonada
por si misma...
Sola.
Pensamiento
11.NOV.2014